Segunda parte del Libro de Forrest. Una continuidad del primero en todos y cada uno de los puntos. Un más de lo mismo aunque a veces usa un tono más irónico y sarcástico hacia si mismo y hacia lo que era ya una realidad: la película. Es entretenido y si te ha gustado la primera, pues no pasa nada por leerlo.
En la contraportada «No dejes que hagan una película de tu vida, sea buena o mala, no importa»
mis marcadores sobre este libro:
- Los árabes los sacaron del tanque con los brazos en alto y los pusieron de pie contra una pared. Bueno, es un decir, porque en ese momento el teniente no llevaba puestas las piernas
- Tom Hanks dijo: Bueno, señor Gump, no se puede negar que es usted un tipo especial. Quizás alguien debería hacer una película sobre su vida. —¡No! —respondí—. ¿A quién iba a interesarle semejante sarta de tonterías?
- Hágaselos ambidextros —interrumpió la señorita Hudgins—. Un hombre como el señor Gump necesita mucho espacio de maniobra.
- —No me digas —replicó el polizonte—. ¿Y qué me dices de ese cerdo? —Es una cerda lazarillo con todos los permisos en regla —respondió el teniente sin inmutarse—. ¿No ve que estoy ciego?