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He sido lector de novelas de aventuras desde que era chaval. Recuerdo como visitaba la Biblioteca del pueblo (Laguardia – Alava) cuando caída la tarde de invierno y ya no se podía hacer mucho en las calles. No me acuerdo si hacía deberes o no, pero había tiempo para todo. Todavía no estaba enganchado a Julio Verne, H.G Wells, Asimov, Clark y otros precursores de la ciencia ficción clásica. Así que las novelas de aventuras, junto con los cómics de Asterix, Tintín, o las historias de Eric Castell eran esas lecturas preadolescentes.

Casualmente hace semanas busqué en mi biblioteca si tenía alguna lectura de Sálgari para el verano pero no encontré nada. Pensé que Sandokán, o alguna de piratas estarían en mis baldas y sería una relajada forma de pasar la tarde a la sombra. No recordaba si había leído alguna más … son ya muchos años y una buena cantidad de libros en la mochila.
Hace unos días el hijo de un amigo ( que viejos somos ya !!! XD ) se ha pasado por la Biblioteca del pueblo buscando, supongo; esas aventuras que aguardan en los estantes para transportar al lector a los parajes mas insólitos para vivir las aventuras de los intrépidos protagonistas. Viajar en el tiempo y hacer volar la imaginación que como dijo Einstein «es más importante que el conocimiento» …

Ese afán de búsqueda le ha llevado a dar con Emilio Sálgari y su «León de Damasco» y cuando el padre ha visto la ficha de préstamo del libro se ha sorprendido que no se había cogido el libro desde 1986, y el último lector de éste fue un chaval de poco más de 12 años con el número de socio: «22». Yo mismo !! XD.

Me ha enviado una foto de la ficha de la biblioteca y me he hecho mucha ilusión. He recordado buenos tiempos sentado en aquellas viejas sillas de madera donde la encargada de turno nos echaba la bronca para que respetáramos el silencio de las estanterías.¡ Cómo leíamos sin obligación !, y de ahí radica mi afición lectora; que dio un bajón importante cuando los libros eran impuestos por el colegio para hacer un comentario de texto, o un resumen, o interpretación personal.

No sé si realmente no se habrá cogido ese libro en otras ocasiones, o si el sistema se informatizó con los años. La cuestión es que esa ficha sigue viva, y que el anterior lector es también un bueno amigo, y el siguiente lo es ya otra generación de buscadores de aventuras …

Buscando por Internet he encontrado la edición:
EMILIO SALGARI / EL LEÓN DE DAMASCO
Legasa, 1981, en su prestigiosa colección «Clásicos de Aventuras». Formato 21×14. Pastas duras. 185 páginas. Ilustraciones en blanco y negro